22 abril, 2009

Vocación pública y Rol Social

A diario nos encontramos con sucesos de índole sociopolítica que ocurren dentro y fuera de nuestro país. Temas como la demanda del Perú ante la Haya, la crisis financiera en Estados Unidos o temas netamente nacionales como la aprobación de la LGE o la aprobación de la inscripción automática en los registros electorales, son los que día a día escuchamos en los noticieros o leemos en los periódicos y que tienen una gran relevancia en las políticas públicas del nuestro país.

 

La Universidad Diego Portales, se caracteriza principalmente por su vocación pública, por su preocupación en aportar proyectos que mejoren la convivencia de la comunidad cuestión que se ve reflejada, por ejemplo, en que la Facultad de Derecho de la Universidad, contribuyó en gran medida a uno de los más grandes cambios en términos de justicia en nuestro país: la realización de la Reforma Procesal Penal.

 

Es por esto, que la Facultad de Derecho, siendo una carrera tan ligada a lo social y a lo político, debe velar por la justicia del país, pero además debe estar pendiente de la contingencia nacional e internacional. Para esto es necesario que, de nosotros mismos, salgan voces que hagan ver que como futuros profesionales, tenemos una opinión, que estamos informados y que somos capaces de poner en discusión temas tan relevantes que acaecen dentro y fuera del territorio nacional.

 

Pues bien, creemos enfáticamente que deben crearse las instancias para que los alumnos de nuestra facultad puedan discutir e informarse acerca de lo que ocurre fuera de la universidad, de modo que puedan construir sus propias opiniones y, consecuencialmente tener la capacidad de plantear una postura clara-y con ánimos de construir- frente a los demás. Creemos que debemos ser participes activos de cada uno de los acontecimientos de relevancia social y política del país, y que nuestra universidad no sólo sea reconocida por la calidad de los trabajos de investigación que realice cada una de las diferentes áreas, sino también por formar alumnos con un espíritu crítico y con una clara conciencia del importante rol social que debemos cumplir, que nos caracterice por tener la suficiente empatía y tolerancia con todos los pensamientos que, ateniéndose a la realidad, existen en nuestra universidad pluralista y en un país al que faltan cambios-muchos- que con nuestra participación activa, es posible lograr.

 

Claudia Núñez y Javiera Riveros

Estudiantes de Segundo Año.-

15 comentarios:

Anónimo dijo...

Pienso que escritos como este reactivan nuestro espíritu como estudiantes, agradezco el entusiasmo de quienes escribieron el texto.

Un abrazo Javiera y Claudia,
Sinceramente las felicito por atreverse a ser agentes de cambio de pensamiento en la facultad,

Saludos,
Benjamín Jordán Liniers.

Valentine Wiggin dijo...

Me gustó harto esto. Está publicado en la facultad? Es más que necesario que veamos qué pasa con Chile (y el mundo, claro), sobretodo porque a veces hay muchas cosas que no entendemos.

Qué opina Derecho Portaliano de esto? Podría(mos)n hacernos partícipes de esto...

FRANCISCO CAÑAS dijo...

De acuerdo con gran parte de lo antes dicho. Sin embargo, existen cosas que creo importante precisar.

Lo primero es que,todos estamos de acuerdo con que la universidad debiera contribuir a crear las instancias para un desarrollo de una actitud critica del alumnado. El problema radica en que, precisamente a la universidad no le interesa el desarrollo de estas instancias, por que, no les intera el desarrollo critico de los alumnos.

En segundo lugar creo que, somos los alumnos los que precisamente debemos crearnos estas instancias, y en la principal en la que debemos inferir es en la de la funcion que debe tener la universidad en la sociedad. Desde mi parecer, observo que nuestra universidad se comporta como una consultora con un cierto prestigio.No como una universidad cuya funcion es fomentar el uso de la razon publica.

Por tanto, para poder formar alumnos con actitud critica, lo que primeramente debemos modificar, es la orientacion que profesa nuestra universidad, para que luego se creen las instancias para la participacion estudiantil.


FRANCISCO CAÑAS SEPULVEDA
ALUMNO DE 3 AÑO.

Anónimo dijo...

"Si se quiere hacer gestión, GRIN es la solución".

Bart Simpson.- dijo...

Un par de comentarios.

-Derecho Portaliano se erige como un Blog de opinión en el que el debate estudiantil es libre, diverso, y tolerante con las divergencias en opinión. A pesar de ello, DºPortaliano, no posee-al menos así lo entiendo yo- una línea editorial o algo por el estilo puesto que cada individuo que participa de él, o sea, "todos" podemos emitir juicios de lo que sea y como sea manteniendo-por cierto- los límites que la libertad de expresión posee. Por lo anterior es que me resta decir al respecto que DP no tiene una Opinión Oficial respecto al tema en cuestión.


-No concuerdo del todo con la opinión de Pancho Cañas dado que considero que aunque estemos o no de acuerdo con que la Universidad sea una consultora o algo así, lo que hay que MODIFICAR no es la orientación que la Universidad profesa sino la orientación que nosotros queremos que la Universidad profese, la Facultad y su orientación debe ser construida a partir de su esencia y, claro está, ella está constituida por nosotros y no por otros.

El punto está en que seamos capaces y concientes de que en la medida que tengamos esa idea clara, es decir, que somos el eje de la facultad, podremos ser, en palabras de Rocha, "agentes de cambio tanto de pensamiento como de acción".


-Por último una pregunta:

¿Quienes deben impulstar estas preocupaciones acerca del debate publica?, ¿Quién debe encausarlas?, ¿Por qué no se ha hecho nada al respecto?


Saludos,


Ignacio Riveros Muñoz
Estudiante de Tercer año.

Anónimo dijo...

Estimados:

Acá hay un punto clave, el que no es parte de la solución es parte del problema.

En la vida, las personas pueden tomar diversas posiciones, pueden ser apáticos, pueden ser proactivos, pueden ser jocosos, pueden ser indiferentes, relativistas, excépticos, revolucionarios, románticos, seculares, hedonistas, desinteresados, neutrales.

Pero quien estudia Derecho y no le interesa el impacto social de lo que estudia, su vocación pública, el impacto que tiene su profesión en el mundo público y privado, permítanme decirlo es apático, y el apático es nuestro enemigo.

Enemigo por cierto toda vez que nuestra profesión exige una intrínseca consciencia social porque todos los días hacemos uso, trastocamos, manoseamos, bienes relevantes, la honra de una persona, la vida humana, la propiedad, tu me entiendes.

Ahora respecto al enemigo, en mi caso, no soy de aquellas personas que le gusta ganarse enemigos y por tanto, hemos creado junto con otras 25 personas el GRIN, plataforma de gestión que cuenta con todos los medios para permitir que cualquiera que tenga motivación logre concretar sus proyectos.

Pero eso no es todo, existen diversos grupos intermedios, entre ellos Opción Portaleana, Derecho Portaleano, Colectivo Armata, Colectivo EnCausa, REC UDP, MPUD, The Tripode, El Burdel, etc... tantos grupos que la apatía debería ser un excentricismo.

Pero supongamos que tu me lees con una irritación tamaña, y piensas que todas estas no son opciones reales... Pues todo bien, probablemente has encontrado un nuevo foco de explotación y es momento de crear, crea una opción, y será una receta fantástica contra la apatía, y entonces, aquello que crees parte de la solución y esta contribuye a que el problema no se masifique.

Asúmelo, no existe excusa, lo que nos dice Claudia y Javiera, amigas muy queridas, es algo cierto...

Esta un mundo esperando nuestra conversión por la proactividad y sólo depende de ti que seamos agentes de cambio tanto en el pensamiento como en la acción.

PAZ,
Benjamín Jordán Liniers.

PS: No te quejes tanto amigo lector, atrévete, nadie te va a juzgar, y sin duda todas tus ideas son ayuda al bien común y aporte para el crecimiento de la facultad, en el momento actual ya no hay excusa a la apatía y tu, si tu, lo sabes.

PS2: Dejé las formalidades propias de un texto porque a veces las cosas hay que decirlas sin trbas mi impedimentos lingüísticos.

Daniel Arce Maillard dijo...

Estimadas compañeras, han dado en un punto clave con su escrito: la labor de la universidad.

Las universidades nacieron como la centro del conociemiento humano, lugar de reunion de los mas ilustres e inteligentes personajes de la sociedad, cuna de las ideas y el debate. El rol actual de las universidades sigue siendo el mismo. La dificultad: el exceso de información por la globalización, la competencia entre las casas de estudios por la excelencia y las políticas de libre mercado imperantes en las casas de estudio. Ello ha hecho perder el norte y apartarnos de ese rol fundamental que estos centros del saber aparejan.

Como bien dice el sabio refrán "lo que todos damos por conocido, no se dice, lo que no se dice, con el tiempo, se olvida". Creo que no debemos dejar que este objetivo tan altruista de las universidades de antaño se olvide. La invitación no solo es para difundir las ideas con nuestros compañeros, sino tambien para refrescarle a las autoridades el verdadero norte que una casa de estudios como la nuestra aparejan consigo. Si lo logramos, mataremos tres pajaros de un tiro: fomentaremos el rol social de la universidad, potenciaremos la vocacion pública del alumno y, por ultimo, lograremos el tan anhelado fin de ser un real centro del saber humano.

Exito y felicidad.
Daniel Arce Maillard.

C. dijo...

Al lector:

He leído cuidadosamente la entrada aportada por las Srtas. Núñez y Riveros, al igual que cada comentario suscrito por los participantes y comunes lectores de este blog. Después de unos minutos de consideración, quiero entregar mi impresión sobre el trozo.

Si bien es cierto que la carrera de Derecho, y para estos efectos el privilegio de ser parte del mundo de estudiantes superiores (Técnicos y universitarios…), nos inculca un deber a lo Peter Parker, es también importante que, como personas que se nutren día a día de la realidad, de lo empírico, de lo medible y de lo efectivamente posible, entendamos ya no solo la gran montaña de dificultades que se levanta entre nosotros y una vida llena de felicidad y satisfacción por el deber ético-profesional cumplido cada día, sino también la existencia de los “otros”: Los que ven las cosas de una manera diferente o derechamente opuesta a nosotros.

El Sr. Jordán hace mención de la apatía como la gran enemiga de nuestra situación nacional, lo que en mi opinión solo acentúa la existencia de esos problemas que después de 20 años de “democracia” no hemos podido resolver en una medida aceptable para nuestros estándares de vida, cada día mas variados y alejados de la imagen que el Sr. Jordán intenta mostrar como negativa en sustancia y esencia. Mi opción por tanto, es tomarle el codo a la situación y usarla a favor de la diversidad y la posibilidad de crear instancias de discusión y crecimiento social más finas, precisas y llenas de discusión fuera de los diversos foros saturados de una política rancia alimentada por el colectivismo partidista y exclusivista (Aquí no hay contradicción) chileno, ya tan enraizado en el suelo de nuestras instituciones y para que decir de nuestro adorado Manicomio – Perdón, Facultad- de Derecho de la Universidad Diego Portales. Es decir, dicho en buen chileno, cortemos la weaita de andar lloriqueando por lo malo y hagamos que las weas buenas sean aun mejores, ok?

Lo que hace GRIN y Derecho Portaleano aun dista mucho de eso (Que no se quede así!), y para que decir los otros grupos. Sin embargo, admito que confío mas en GRIN y DP que en otros, solo porque encarnan algunas ideas muy cercanas a las mías, que espero no pierdan.

La necesidad imperiosa de romper la dicotomía derecha –izquierda y político-apolítico, como lo decía el profesor Álvaro Bardón, se traducirá en la apertura y amplitud de temas y tabúes (vueltos “de facto”, mas no morales) que ya no solo interesarán a los actualmente involucrados en la política universitaria y nacional, sino a todos los demás que nos sentimos (o podríamos sentirnos) arrastrados por la resaca grupal, sea la del CAAD, la de GRIN, la de Opción Portaleana, del Colectivo Armata o cualquier otro grupo “intermedio” (Mi idea es también adelgazar a grados anoréxicos ese “intermedio”, por el bien de la diversidad tan necesaria en una sociedad de primer mundo).

La labor de una universidad, como lo expresa la misma palabra, es ser universal, inclusiva y diversa. Debe impulsar no solo la búsqueda de los ideales propios de cada carrera (Derecho y justicia, Medicina y la salud física-mental, etc) en cada estudiante, sino también la promoción de la búsqueda de la identidad individual y la felicidad personal basada en el respeto y apoyo de los otros entes de la sociedad cuya libertad es el limite de la libertad propia; Debe fomentar el cambio y el respeto por la tradición, y permitir la existencia de debates entre lo nuevo y lo viejo. Debe fomentar la elección y la existencia de opciones plausibles y realistas, pero que dejen ese esencial espacio pasional que sirve de lubricante para nuestro motor vital y futuro profesional. O sea, una universidad debe entregar la mayor libertad posible a cada persona que entra y se vuelve parte de una de ellas, sin importar que sea publica, privada, tradicional o progresista. En consecuencia, una universidad debe ser en mi opinión LIBERAL y (por lo tanto) PRÁGMATICA, cosa que debe traspasarse a sus estudiantes, sin perjuicio de que ellos tomen libre e informadamente sus propias decisiones, cada una tan legitima como la siguiente y tan digna de respeto y tolerancia como cualquier otra.

Es con esto con lo que me refiero a tomarle el codo a la situación: Debe considerarse la existencia de la variedad, la existencia de la disidencia, de la apatía, de cada tema relevante dentro del ámbito humano, sin miedo a la censura, a la critica, al rechazo, a ser apuntado con un dedo o al repudio social (¡VIVA LA DIFERENCIA!). El velo de la ignorancia debe ser eliminado, y debe ser reemplazado con la Luz de la realidad, alterable por nuestros medios racionales, impulsados por nuestro deber ético de ayudar a nuestro prójimo y a cualquiera que pida nuestra ayuda, que no siempre será relacionada a nuestra experticia jurídica, sino simplemente humana.

Mis propuestas básicas, ya una vez explicadas a un miembro de GRIN, es la creación de foros que trascienden lo político y que invaden el territorio de lo social, lo moral, lo religioso, lo cultural, lo económico y lo de cualquier otra índole que permita el descubrimiento de nuevas opciones y cosmovisiones, sin dar cabida a los desprecios falaces en los que muchos lamentablemente caen por ser imperfectos, pero permitiendo la existencia del pensamiento humilde y critico, extenso pero directo entre personas humanas, uniendo mas a las personas en torno a los ideales que cada carrera fomenta. Una vez derribadas las trabas de temas generalmente vistos como triviales y poco relevantes (La irrelevancia es algo personal, pero no total), lograremos ver con nuevos ojos las protestas contra el fallo del Tribunal Constitucional respecto de la píldora del día después, las protestas estudiantiles contra la LOCE y LGE, las protestas contra la colusión de farmacias, la demanda peruana por los asuntos limítrofes con Chile y las diversas soluciones para la crisis económica que actualmente todos ven como una gran tragedia, en lugar de verla (también) como una gran posibilidad de oportunidades económicas, e incluso y porque no, un análisis sobre las tribus urbanas tan presentes y trascendentales en nuestra sociedad actual.

Finalmente propongo también, ya desde un punto de vista más personal, el favorecimiento del individualismo, de la libertad personal, de la disidencia y de la apatía como síntoma de algo bueno y no malo, sin desmerecer el alcance que el Sr. Jordán entrega sobre esta posición. Finalmente, y haciendo una ligera alteración a una frase leída en uno de los comentarios de mas arriba, "si se quiere hacer gestión, la diversidad de opiniones es la solución". Y respondiendo a las preguntas del Sr. Riveros Muñoz, los responsables de lograr todo esto son los mismos que hemos escrito aquí, y que seguiremos escribiendo en este u otros blogs o medios idóneos.

Deseándoles a todos un buen resultado en sus respectivas solemnes y en lo que les resta de semestre, se despide

Un “liberal en ciernes” de la Generación 2006.

P.D.: Lamento lo extenso de mi comentario, velaré por que no se repita.

Benjamín Jordán Liniers. dijo...

(primera parte)

"C" me gustó tu comentario, aunque no pienso lo mismo que tu, pero me encantaría saber quien eres para conversar contigo o simplemente saber que persona opina lo que estáescrito.

Sin perjuicio de eso, tu comentario es extenso pero dice mucho, planteamientos razonables, liberales progresistas a mi juicio, muy interesantes, y creo que posiblemente, representativos de una gran cantidad de personas, pero luego, te repito con mucha honestidad no lo comparto.

No lo comparto por un punto que creo que es el que nos hace diferir. Este punto dice relación con que, yo pienso, al igual que tu, que cada uno tiene la opción de ser apático si lo quiere, con la únic distinción que quien estudia derecho, no puede hacer eso, porque a mi juicio es inherente al derecho la justicia y la conciencia social proactiva.

Sólo ese es el punto de discordia.

Con todo, creo que los foros que propones son muy interesantes, y es verdad, que en la universidad si bien son todos los alumnos capaces de hacer mucho para cambiar la situación actual, pareciera existir una levadura, un grupo de gente que está dispuesto a dar su vida por eso, porque todo sea mejor, por el bien común.

Benjamín Jordán Liniers. dijo...

(segunda parte)

Pienso tu eres de quienes son parte del cambio, de los que quieren ver a la escuela mejor, y te invito a que lo hagas porque siento tu ímpetu, tus ganas...

Por último, pienso que es válido que aun aquellas personas que tienen ganas de hacer proactiva la escuela, no todos son del agrado del mundo, y quiero que me entiendas, cuando a pesar que yo sea o no de tu agrado hay detrás de todo lo que hago muchas ganas de hacer el bien, muchas ganas de colaborar, y en fin muchas ganas de hacer que personas con entusiasmo como tú sean capaces de todo, si es que sienten que para lograrlo necesitan de la pequeña ayuda que puedo yo dar por la experiencia que me ha dado haber participado durante estos años en grupos de representación estudiantil como el CAAD y el CODE.

Con todo, respeto a la gente que no piensa como yo, a ti yo te respeto, creo que lo que dices es muy significativo, sin embargo quiero plantearte que en esto hay que intentar aunar voluntades, crear conciencia, atrevernos a liderar nuevos desafíos y crear en las personas que se tienen o no fe ese sentimiento que los hace sentir que ellos pueden ser agentes de cambio, sobre todo en un tiempo, en que la apatís hizo que sólo existiera una lista para el centro de alumnos, y que fuera profundamente inidónea.

Benjamín Jordán Liniers. dijo...

(tercera parte)

"C", lo que pasa en la escuela a mi me preocupa mucho, nosotros queremos ser representados por líderes electos en competencia, que sean los más capaces o por último la opción elegido, mas, no la opción por desarte que tenga finalmente votos porque el contendor es quedarnos sin CAAD y que finalmente esto conlleve a que los 240 votos que se emiten a favor conlleven unos 120 por adherencia y el resto por preocupación.

Bienaventurado sea el día en que salga una opción distinta a lo que yo creo en la universidad, pero producto de la adhesión de la gente, de la voluntad soberana, y no de la apatía, de ese sentimiento odioso de la única opción, junto con la pérdida del debate precioso de ideas, de paradigmas de escuela.

Como no queremos que esto pase, queremos en cambio que exista una hermosa campaña de debate profundo de opciones reales, liberales y conservadores de pensamiento, hombres de izquierda y derecha debatiendo grandes temas para la escuela, listas respetuosas del pensamiento del otro, pero no, y de ningún modo quisiera que al alumnado no se crea el cuento y se sienta no capaz de ser parte del CAAD o el CODE, he ahí también la necesidad de crear nuevos líderes de todas las tendencias, que sean capaces de debatir en el diálogo público y abierto, y de hacer reales las grandes ideas de la voluntad común constitutivas de los debates universitario de temas transversalmente relevantes.

"C" yo sé que soy odioso a veces, lo sé, pero es que a los hombres de verdad nos hierve la gusta la pereza, la apatía y la injusticia... aunque tu no me lo digas yo siento que bien en el fondo a ti te pasa lo mismo.

Un abrazo seas quien seas, aunque a ti te guste o no mi comentario, creo que el tuyo fue constructivo.

Mucha paz!

Benjamín Jordán Liniers.

Benjamín Jordán Liniers. dijo...

(cuarta parte)

Largo y latero mi comentario.
PAZ!

Benjamín Jordán Liniers. dijo...

Tiendo a no revisar los post y quedan con todas las imperfecciones que este tiene, lo único que creo que puede no entenderse y quiero aclarar es "nos hierve la guata" la pereza, la apatía y la injusticia.

PAZ !

C. dijo...

Sr. Jordán:

Como primera cosa, agradezco especialmente su comentario en respuesta al mío. Creo sin exagerar que este seria el primer o segundo feedback que recibo dentro de este blog y eso es siempre un agrado. En seguida, me dedicare a entregar mi respuesta.

Usted ha dado en el clavo respecto de que somos de opiniones diferentes y muy probablemente contrapuestas, lo que solo sirve para probar que mi proposición de considerar cada opinión como valida y absolutamente legitima y defendible es ya no solo útil, sino empíricamente innegable. Solo las acciones u omisiones cometidas bajo ellas son dignas de ser juzgadas como debidas o indebidas, o como sea el caso. En vista de lo anterior, prefiero reservar mi identidad por el momento, y usar mi anonimato como un medio de expresión más tranquila y adecuada a mis intenciones, entre las que se encuentra discutir con calma cualquier punto que usted (o cualquier otra persona) coloque en la mesa.

En lo referente a mi consideración de la apatía como un síntoma de algo no necesariamente negativo, en realidad quería explicar que a través de la consideración de esta apatía se pueden diversificar las áreas que el Derecho puede abarcar dentro de su aplicación, a fin de tener temas subdesarrollados y subestimados en Chile (Como lo podrían ser los temas de sexualidad e identidad, de religión y libertad de culto, un mayor control de las autoridades y una amplitud de libertad para el individuo) cada vez más tratados y desmenuzados, a fin de llevar justicia y razón a zonas que lamentablemente siguen siendo oscuras en la jurisprudencia y la doctrina nacional, por no decir el consciente colectivo medio. Con esto también explico mi interés en llevar a la palestra la discusión de temas que escapen de lo político y que se enfoquen en temas que si bien pueden ser vistos bajo prismas políticos, son más bien humanos y personales y ya no artificiosos y colectivos.

Si algún estudiante de Derecho decide que los Derechos Humanos o la Píldora del Día Después son temas trillados, sobreexplotados y usados de manera incorrecta o abusiva (véase algunos izquierdistas y derechistas o cercanos a alguna de estas áreas, respectivamente) para amasar partidarios, y por tanto decide dedicarse a otras áreas que el Derecho toca y/o considera dentro de su campo de aplicación, pero que no son tema común o son incluso de poca importancia social a los ojos de la generalidad, merece este estudiante ser considerado como alguien apático o poco comprometido con la sociedad? Que pasa si a este estudiante no le gusta el Derecho, o si en realidad solo quiere tener una profesión rentable que le permita subsistir en el futuro y mantener a sus seres queridos? Es con estos ejemplos que defiendo mi punto, ahora mejor explicado.

Para concluir, quisiera expresar mi opinión con relación a una idea que al parecer usted tiene lamentablemente muy metida en su cabeza y que probablemente limita su discurso y sus intenciones innecesariamente: El agradarle o no a las personas. Si usted es sincero con los demás y con usted mismo (Cosa que he visto en las innumerables veces que se ha dirigido al estudiantado), es relativamente irrelevante si usted le cae mal a alguien mas, y lo mismo se aplica en un grado mas tenue en el caso de que el oyente sea de su agrada o que usted sea del agrado del oyente. Por experiencia personal, solo puedo decir que esa situación solo genera falacias y trabas, y casi nunca un verdadero argumento digno de reconocimiento y/o refutación, por lo que le pido encarecidamente que no considere inmediatamente si usted cae bien o mal, sino que se enfoque en lo que realmente es importante: La argumentación y el debate. Las falacias no pueden ser toleradas en un tema tan delicado como el tratado por las autoras del texto publicado y de los señores y señoritas comentaristas, incluyéndolo a usted, y para que hablar de otros temas. Empero, agradezco sus muestras de respeto, y expreso las mías para con usted del mismo modo.

Saludos.

Anónimo dijo...

Me parece muy positivo el contenido del texto en cuestión, algunos alumnos pecamos de falta de iniciativa, por diversas razones preferimos la seguridad y comodidad de una posición estática antes de alzar la voz, gracias por ser una luz que nos anima a tomar la iniciativa, a sentir realmente la vocación que -para mi gusto- debe tener un futuro abogado, la del servicio público y compromiso real con todos los sectores de la sociedad, creo que muchas personas tienen buenas ideas, sólo falta ponerlas sobre la mesa y trabajarlas.


Ignacio Pérez López